Ramírez: «La PGJ y su Procurador no valen madre»

Aguascalientes, Julio 09 (2014).- Para el dirigente de la Confederación Regional Obrera Mexicana (CROM), Jesús Enrique Ramírez Ramírez, “la fiscalía estatal es una porquería, tiene los niveles de deficiencia más altos de todos los tiempos, urge una reestructuración administrativa y acabar con todos los vicios, el burocratismo y la corrupción”, manifestó en una rueda de prensa ofrecida esta mañana.

El líder obrero, asegura que el Procurador Felipe Muñoz Vázquez, está en deuda con el grueso de los aguascalentenses que se han visto involucrados con algún acto delincuencial toda vez que la respuesta hacia ellos es tardía, lo que deriva en una calificación de ineficiencia el desempeño de él y sus colaboradores quienes poco ayudan al funcionario a tramitar con celeridad las averiguaciones.

Es una porquería, -no vale madre, no sirve para nada-, al interponer una denuncia se tardan hasta ocho meses en consignar a una persona que se le ha comprobado su responsabilidad, esto es ineficiencia pura, los ministerios públicos no investigan, recolectan una serie de datos en expedientes que ahí se van llevando meses y meses, refutó el defensor de la clase trabajadora.

“No hay peritos suficientes y los que hay no tienen puesta la camiseta, las denuncias son una odisea, Llegas a poner una denuncia, te tratan como el delincuente, te hacen esperar horas, el trato no es muy adecuado desde la que te recibe, incluso les dices que tienes sospechas de quién fue el que te robó y no hacen nada; no hay investigación; no hay una eficiencia, pulcritud en los administradores públicos”.

Esa deficiencia aseveró, es producto de la burocracia la cual provoca la dádiva, dijo no entender como hubo quienes pretendieron eternizarlo en el cargo, al grado de buscar reformar la ley en la materia. “¿Es muy chingón el Procurador, o por qué razón se pretendía que durara nueve años al frente de la dependencia”, cuestionó Ramírez Ramírez quien ejemplificó varios casos en los que ha intervenido la PGJ, asegurando que en todos dejó un mal sabor de boca.